La primera visita al templo de Kukulkán
Marcel Cormier
Me acuerdo cuando era niño, de unos diez años de edad, y oí algo del mundo maya por primera vez. Nuestro profesor nos explicaba algunos de los logros de diferentes poblaciones mesoamericanas. En particular, recuerdo que habló de los conocimientos del pueblo maya en astronomía y matemáticas, así como sus grandes construcciones. Nuestro libro tenía una fotografía de una gran pirámide. Ahora me parece que era una fotografía del Castillo de Chichén Itzá, del templo de Kukulkán. Sin embargo, es probable que se tratara de otra construcción.
Recientemente mi esposa y yo fuimos a México y tuvimos la oportunidad de visitar Chichén Itzá. Tenía muchas ganas de ver todo el sitio, pero especialmente el imponente Castillo o Templo de Kukulkán. Fue la realización de un sueño que tenía desde hacía más de treinta años. No fue una decepción. Que majestuoso!
Como otros turistas, subí los noventa y un escalones para llegar a la cúspide. Desde ahí podía ver algunos otros edificios magníficos, como el del Juego de Pelota, el Templo de los Jaguares y las Águilas, y el Templo de los Guerreros o de las Mil Columnas. Este panorama me sirvió para darme cuenta hasta qué punto las realizaciones de este pueblo como constructores, científicos y matemáticos, son impresionantes.
Aunque pudimos solamente visitar un sitio arqueológico, ello me ha motivado para aprender más sobre los mayas y, definitivamente, para regresar a esta región y conocer otros lugares. En nuestras próximas vacaciones, creo que vamos a visitar México de nuevo, pero con un plan que incluya dos o tres ciudades antiguas. Tengo ya prisa por conocerlas!