Cuando era niña
tenía un perro que era gordito porque le gustaba comer de todo. Le decíamos que podía comer sólo la comida en su
plato y nunca la comida que estuviera en la mesa. Todavía tenemos un gato que
era muy chiquito en el tiempo del perro. El gato es muy independiente y camina por toda la casa,
incluyendo en las mesas.
Un día mi mama compró unas salchichas, las puso en la mesa y después fue al baño. Cuando regresó,
no había salchichas, ni papel de salchichas. No lo podía creer. Pensó que las había olvidado en la
tienda. Pero otro día pasó algo similar y mi mamá
empezó a investigar. Descubrió que mi gato y el perro estaban trabajando juntos. El gato baja la comida al perro y para el perro hay una
regla que las personas al principio no saben: todo que está en el
piso es del perro. Por eso ustedes tengan cuidado con la comida y sus
documentos importantes que estén en el
suelo.
*Estudiante letona de Español, Intermedio 1
CEPE–Polanco, UNAM, México, D.F.
Foto: http://lifebetweenlanes.wordpress.com/2012/12/