La inteligencia artificial en el mundo del arte
Amandine Bertoux*
Probablemente nunca se han dado cuenta, sin embargo, la inteligencia artificial forma parte de nuestro mundo cotidiano. Sin saberlo, la vemos en los anuncios, en las redes sociales, internet, los coches autónomos, los asistentes de voces, los relojes conectados y el Chat GPT, entre otros.
La pregunta que todos nos hacemos es: pero, ¿qué es la inteligencia artificial? Es un algoritmo que permite a la computadora crear, traducir, hablar, escribir y analizar. Nuestro tema de hoy va a responder algunas preguntas que han llegado después de la invención de la IA, como si el arte de hoy puede realizarse sin la ayuda de los algoritmos.
Para empezar, el arte hecho con la IA es muy complejo y objeto de controversia. Algunos artistas aplauden las oportunidades que trae y otros lo ven como un dilema ético y creativo.
Según el sitio de National Geographic de España, la inteligencia artificial llegó alrededor de los años 1930 como concepto de un algoritmo. En 1956 apareció por primera vez el término “inteligencia artificial”; El año siguiente Franck Rosenblat, de Estados Unidos, diseñó la primera red artificial; algunos años después, en 1966, Joseph Weizenbaum creó una inteligencia artificial con voz. Demos un salto en el tiempo: en 2018 se creó, a través de un colectivo francés llamado Obvious, lo que se dice que es la primera obra [de arte hecha con IA] reconocida (1).
Después de echar una mirada sobre la llegada de la IA al mundo, vamos a ver cómo se ha incorporado paulatinamente dentro del mundo del arte. La primera creación generada por una IA fue vendida en 2018 y todavía tiene el récord del cuadro más caro (432, 500 dólares**) por haber sido hecho por un algoritmo y no a partir de la mano humana. La pintura se llama “El retrato de Edmond Belamy”. La imagen tiene aires de la pintura del siglo XVII y fue creada con por medio de una computadora. No es una pintura hecha como todas las otras que conocemos, es decir, que no fue realizada por la mano humana sino que es una impresión de tinta. Se piensa que la obra mezcla al mismo tiempo estilos de varios pintores como Bacon, Velázquez y Signac. Para crearla, los ingenieros tomaron algoritmos que alimentaron un sistema de más de 1500 retratos pintados entre los siglos XIV y XX.
Los responsables son un artista, un empresario y un especialista en ciencias, quienes conforman el colectivo francés Obvious, reconocido en el mundo de la IA (2).
Para continuar, regresemos al país donde estamos, México, el cual tiene artistas reconocidos, como la primera artista virtual con inteligencia artificial, llamada Raquel-IA. Además, México tiene la primera obra de IA de toda Latinoamérica, El Ojo de México, ubicada en la alcaldía Miguel Hidalgo. Se trata de una instalación gigantesca que expresa el movimiento de los habitantes de la CDMX a través de audiovisuales; busca transmitir a los espectadores las relaciones que existen entre el arte, la ciencia, la tecnología, el urbanismo y la movilidad (3).
Por otro lado, se dice que la IA ha dado pie a los artistas del siglo XXI, que han utilizado la IA para ayudarse o para crear obras que nunca se habían concebido a causa del uso en esas obras de un tipo de arte inédito. Por un lado, están los artistas que tienen miedo a la llegada de la IA en el mundo del arte porque tienen la sensación de que los artistas que trabajan mediante la computadora no son artistas y que lo que crean no es real. Del mismo lado, Christoph Schommer, profesor en la Universidad de Luxemburgo, hizo una entrevista después de un evento sobre IA y afirma que el humano todavía tiene el poder, la posibilidad de encontrar maneras de ser creativos. Simplemente hoy en día el sistema de IA trabaja todo el tiempo de la misma manera, según la cual fue creada. Por ejemplo, un artista no puede reproducir su obra; la IA sí. En 2022 una obra generada por IA ganó un premio en un concurso abierto a todos los artistas, no solamente quienes la utilizan, sino también a quienes usan las manos para crear. Muchos artistas acusaron en Twitter a Jason Allen, el ganador, de “acelerar la muerte de los trabajos creativos” (4)*
Para terminar, fue durante el concurso de Bellas Artes de la Feria Estatal de Colorado en 2022, donde Jason Allen ganó en la categoría de arte digital con una obra llamada “Theatre d’Opera Spatial”. La imagen, creada con la ayuda de algoritmos, representa una escena de una ópera. Vemos una escalera barroca y tres bailarinas, la de la izquierda parece que está cantando (se ve en su postura que el aire está saliendo de sus pulmones); la del centro puede ser que esté al borde de la escena y la tercera, en el centro a la derecha, puede ser que esté esperando su papel. En el segundo plano hay una orquesta y, al fondo, lo que vemos todos a primera vista: un círculo gigantesco que nos hace pensar en la luna. Toda esa descripción puede aplicarse también para una pintura hecha por las manos de una persona enfrente de su caballete en su taller. Eso sí puede ser, sin embargo, en el caso de la obra de “Theatre d’Opera Spatial”, no.
Sin poner mucha atención, al recorrer un museo rápidamente pensamos que es una pintura realizada por la mano humana con pinceles, pero no, una IA la creó. Después de haber ganado el concurso, Jason Allen dijo que sabía que el tema iba a ser controvertido, pero que estaban desacreditando el elemento humano en su arte generado por IA y explicó que su trabajo con los algoritmos fue esencial para modelar y crear la obra. Según su perspectiva, los críticos juzgan el arte por el método y defendió que su trabajo debería evaluarse del mismo modo, aunque cree que en el futuro cercano existirá una categoría de arte creado por la IA (5).
Por otra parte, las obras generadas con la ayuda de una IA son de varios tipos: pinturas, música, fotografías y esculturas, etcétera.
Ahora vemos que la IA tiene un papel esencial en el arte y que ayuda a varios artistas a aumentar su productividad, por ejemplo, cuando tienen varias pinturas en proceso y no pueden terminar todo sin que alguien les ayude. Esta persona podría ser una IA y apoyaría, por ejemplo, para crear un fondo o un personaje en tercer plano sin muchos detalles. La IA hoy en día no es capaz de tener la misma calidad que el humano, no obstante, la podemos utilizar para ahorrar tiempo con los detalles. Según algunos artículos, las inteligencias artificiales acumulan información y con los algoritmos tienen un aprendizaje profundo y pueden crear lo que queramos sin perder tiempo. Los nuevos algoritmos permiten la reproducción de imagen hasta tener un resultado realista y estético. Todo eso con el objetivo de tener una imagen con formas, colores y texturas que podemos encontrar en la realidad.
Es importante decir que la IA no tiene ni una noción de arte ni de creatividad, las obras de arte generadas por IA son solamente el resultado de una creatividad. De una comprensión de emociones y también de la transformación de indicaciones escritas del artista detrás de su computadora. La IA ofrece una posibilidad infinita de proposiciones de imagen donde el resultado es de buena calidad. Sin embargo, tiene sus límites y las imágenes pueden parecer imprecisas. Tenemos muchísimos ejemplos en los que en una pintura hecha por IA el personaje no está perfectamente creado o hay errores que podrían ser mejorados. Seguramente en algunos años esas limitaciones van a desaparecer. Una de las ventajas del arte generado por IA es que se puede producir de forma rápida y eficiente, lo que permite a los artistas experimentar con nuevas ideas y técnicas a un ritmo más rápido. También puede ayudar a mejorar las formas de arte tradicionales al proporcionar nuevas herramientas y métodos para que los artistas creen sus obras. Sin embargo, el futuro del arte no se limita al generado por la IA.
El arte es una forma compleja y multifacética de expresión humana que va más allá de la simple estética. Implica emociones, experiencias personales, contextos culturales y comentarios sociales que reflejan la condición humana. Aunque el arte generado por la inteligencia artificial ha mostrado resultados impresionantes en los últimos años, es poco probable que reemplace por completo a los artistas humanos. Los algoritmos de IA pueden crear nuevas imágenes e incluso reproducir estilos de artistas famosos, pero no tienen la capacidad de expresar emociones, pensamientos y experiencias únicas que solo los humanos pueden transmitir a través de su arte (6). El uso de la IA puede ser útil, pero detrás del uso aparecen preguntas sobre la legitimidad, la creatividad, las preocupaciones éticas y la propiedad intelectual.
Sobre la propiedad intelectual, con la IA emergen preguntas sobre derechos autorales y el derecho a la imagen. Tomemos como ejemplo a Francia: el gobierno francés todavía no ha creado una ley que proteja a los artistas en caso de que las IA roben o repliquen un motivo o un estilo.
Algunos artistas dicen que la IA acelera la muerte de los trabajos creativos. Otros piensan como el director de Stability AI, Emad Mostaque, que se trata de comparar estos programas con herramientas simples, como Photoshop. Según él, la IA permitirá que millones de personas se conviertan en artistas y creen toneladas de nuevos empleos creativos. A la vez se cree que el uso poco ético o hacer cosas ilegales es problema de los usuarios, no de la tecnología. Para artistas pioneros en el uso de la IA, como el alemán Mario Klingemann, las máquinas pueden ampliar nuestros procesos creativos y abrir soluciones jamás imaginadas.
En una entrevista que dio a El País en 2020, Klingemann agregó que la máquina puede producir muchas cosas, pero aún no puede dilucidar cuáles tienen sentido y cuáles no, así que seguimos siendo nosotros quienes debemos encontrar todo lo que tiene sentido para nosotros mismos. Otras personas piensan que existe la preocupación de que las empresas exploten esta tecnología para reducir los costos y reemplazar a artistas reales con alternativas generadas por IA, lo que podría poner en peligro los medios de vida de los artistas profesionales.
Para concluir, a partir del momento en el que se creó la inteligencia artificial hasta ahora y, según yo, los artistas pueden sacar de la IA muchísimas ventajas que los ayudarían a aumentar su creatividad, a explorar nuevos mundos y a mejorar su eficiencia. Al mismo tiempo, la utilización de la inteligencia artificial plantea algunas preocupaciones sobre la responsabilidad artística y la propiedad intelectual. También puede reducir la importancia del elemento humano en el proceso de creación artística. Por lo tanto, es importante encontrar un equilibrio entre el uso de la IA como herramienta y el mantenimiento de la creatividad humana. Tendremos que vivir con las inteligencias artificiales porque pueden abrir nuevos horizontes para el arte y la creatividad. Sin embargo, se deben tomar con precaución para utilizarlas de manera ética y responsable.
*Estudiante de Francia egresada del CEPE
**(En otras fuentes se maneja la cifra de 380 000 euros. N. de E.).
Imagen: freepik.es
Obras consultadas:
2) https://www.france24.com/es/20181026-obra-inteligencia-artificial-edmond-belamy
3) https://www.timeoutmexico.mx/ciudad-de-mexico/arte/el-ojo-de-mexico
4) https://www.virgule.lu/culture/dans-l-art-l-utilisation-de-l-ia-est-un-avantage/1066769.html
5) https://www.businessinsider.es/obra-creada-ia-gana-concurso-pintura-muerte-arte-1117665
Visiten el blog de la revista, donde podrán escribir opiniones y comentarios de este artículo:
https://floresdenieve.cepe.unam.mx/blog/index.php/2024/01/15/la-ia-en-el-mundo-del-arte/