En este mundo muy diverso
siempre tratamos de unirnos y comprendernos, pero a veces
estamos limitados por las diferencias de cultura, lengua y maneras de pensar.
Por eso, en 1887 Ludwik Lejzor
Zarenchof empezó el proyecto de crear una lengua
internacional para facilitar la comunicación entre los países. En 1905 publicó
el libro Fundamento Esperanto, en el cual explica todas las características del idioma.
El esperanto tiene
influencias de lenguas indoeuropeas, específicamente del francés, italiano,
alemán, inglés, neerlandés, griego antiguo, ruso, eslavo y polaco La lengua es
igual para todos. No es propia de ningún país, así que tenemos la misma
capacidad de aprenderla. No soló el idioma es igual, sino también es fácil de aprender
en comparación con otros. Existen estudios que demuestran que su aprendizaje
toma menos tiempo. Por ejemplo, este estudio señala que para un alumno francés,
aprender el alemán requeriría 2000 horas, mientras que el esperanto solamente 150 . Además, el idioma es de una sencillez increíble.
Primero, todos los sustantivos terminan en ''o''; se añade una ''j'' para el
plural; ''n'' es para los objetos directos; los verbos terminan en ''as'' y no tienen
conjugación. Además, el orden de las palabras en una frase no importa, así que
si cambian, eso no cambia el sentido de la frase. Por todo esto, es muy
interesante de aprender.
A pesar de que es una
lengua inventada, está viva. Es la única que rebasó el estadio de proyecto para
volverse internacional. Hoy día hay tres universidades que dan cursos en
esperanto, universidades en Romania, Bulgaria y Eslovaquia. Se estima que hay 2
millones de personas que hablan esperanto y mil que la tienen como lengua
materna.
* Estudiante canadiense de
Español Intermedio 1
CEPE Taxco, UNAM, México